Le pregunte a un ángel, cual es el peor castigo? y él me respondió : "AMAR Y NO SER CORRESPONDIDO".
 |
| Ojos brillantes de luz y sapiencia.. |
ojos brillantes
de luz y sapiencia?
Me infiero que son dos
frutos paridos,
por estrellas de
incesante luminosidad.
Esa mirada brillante ha
embaucado
el torrente de mis
neuronas..
Esa mirada sabia vive
 |
| No soy abyecto y vil por amarte... |
no está sola, ya la posee
un amor.
Sobrevuela en mi mente
una colorida mariposa,
es Afrodita la diosa
encendida de la belleza,
mi pensamiento me dice,
que eres tu princesa,
la que perfuma con
amor.
Quizás sí me amaras
me enseñarías a
quererte, y yo lo ansío.
No soy abyecto y vil
por amarte de
improviso, no soy
presuntuoso y vano
por desear acariciar con
las yemas de mis
dedos suavemente, el
.jpeg) |
| ...de tu géiser ardiendo en mis labios... |
de tu piel. Anhelo
lamer y sentir los efluvios,
el incienso,la lluvia
algodonosa de tu
géiser ardiendo en mis
labios sedientos
de la sal de tu infierno
cálido,
escuchando tus largos,
quejumbrosos, incesantes
gemidos placenteros en
mis tímpanos como
una melodía plena de
amor, pasión y felicidad.
.jpeg) |
| ...Esos gemidos, henchidos de placer |
esencial, arde
buscando el rojo de
tus venas,
para que sean cómplices
de las mías.
Tal vez la certeza de mi
verdad,
no sea la misma que la
tuya, pero siempre,
"la razón tiene razones"
que el cuerpo se afana
en entender
con el mísero y ardiente
fuego de la pasión.
Esos gemidos, henchidos
de placer los
envidia el lechoso
 |
| ...la esencia de tu espíritu, como los.. |
odiando y maldiciendo al
astro rey,
en sus incontrolables
eclipses de amor negando
el orgiástico sudor de la
pasión descontrolada.
El sueño paradigmático
de tu amor, la esencia
de tu espíritu, como los
trinos de una alondra
primaveral, ha anclado en
el ocaso de mi alma.
.jpeg)
Acaso me odiarás, me
despreciarás, por que
en un tiempo tan finito
te adoro con
un amor tan infinito.
El tiempo es mísero para
los seres, quizás
escaso para ti, para que
tu mirada se
torne dulce, melancólica
llena de amor,
para regalar a este osado
toda
una vida de amor...sin
fin y sin final. Juan Carlos Cruz Bitancourt.
No hay comentarios:
Publicar un comentario